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San Sebastián: A modo de balance

por © NOTICINE.com
Carolina G. Guerrero
Por Carolina G. Guerrero

Llegó a su fin la 62 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián, con un balance final aceptable. En el apartado oficial hubo un cine de mejor calidad que el pasado año, pero con puntos a mejorar, como el número y la procedencia de los films a concurso, casi todos provenientes del precedente en pocas fechas Festival de Toronto, que aunque está en Canadá y no sea competitivo, existe, y a él asisten muchos profesionales relevantes tanto del firmamento estelar, como de medios internacionales de prensa. Sabemos que lo que hace grande a un certamen son sus buenos estrenos mundiales, y en en el Zinemaldia en casi todos los casos hubo que conformarse con estrenos europeos, porque los canadienses ganaron la primicia.

A la hora de los premios (por cierto, Concha de Oro para un film español... estrenado en Toronto) algunos títulos quedaron en el tintero en favor de otros, que quizás no tuvieran tantos merecimientos (aunque en esta edición nadie se quejó ni abucheó al conocer su palmarés).

Denzel Washington fue el encargado de inaugurar esta fiesta del cine con su ultimo trabajo "The Equalizer/El protector", una cinta previsible de acción en su segunda parte que no ha terminado de convencer al publico, el actor afroamericano también recogió satisfecho y agradecido el primer Premio Donostia del 2014 para después continuar con su promoción europea. Al final del festival el otro galardón a una carrera fue para el puertorriqueño-español Benicio del Toro, también con un nuevo lanzamiento bajo el brazo, "Escobar: Paradise Lost".

Podemos parecer nostálgicos, pero el Premio Donostia ha perdido buena parte de sus esencias. En el pasado eran un reconocimiento a una trayectoria y el protagonista único era el receptor. Ultimamente se dan a actores que están en plena gira promocional y los focos se los llevan más las películas que ellos. Tal vez así el certamen vasco se ahorra dinero, pero a costa de minimizar la importancia que un día tuvo esa estatuilla (vean si nó el palmarés de receptores sobre todo en la época de Diego Galán).

Las cintas nacionales, volviendo a la competencia, han sido la sorpresa de este festival. "Magical girl" se llevó la Concha de Oro a la mejor película, y su director Carlos Vermut la de Plata al mejor director. No es mal cine, el que se puede ver en este trabajo donde el guión está muy bien estructurado y sorprende, pero sí puede que se le vaya algo la mano en sus delirios, para llegar a ser una cinta redonda.

En cambio, "La isla minima" sorprendió a todos y gustó a muchos, porque su director Alberto Rodríguez ha conseguido plasmar magistralmente episodios oscuros e inquietantes, con una atmósfera e interpretaciones perfectas. Este trabajo se llevó un par de premios, el de mejor fotografía para Alex Catalán, totalmente merecido, y la Concha de Plata al mejor actor que recayó en el coprotagonista de la misma Javier Gutiérrez. Quizás fue duro para Raúl Arévalo recoger en la gala de clausura ese premio que podía haber sido tranquilamente para él,  ya que bordó su papel de policía progresista y honesto.

Buen sabor de boca dejaron títulos como "The Drop/La entrega", "Tigers", "Una novele amie" o la cinta danesa "Stille Hjerte", y -por supuesto- la película de clausura "Samba", que no concursaba.

Fueron menos convincentes las apuestas suramericanas "La voz en off" o "Aire libre", que no gustaron a casi nadie, y correctas en su factura "Loreak" y "Lasa y Zabala" sin contar con el  "Autómata" de Banderas, que no terminó de cuajar ni en critica ni en público.

Hubo casi unanimidad en descalificar el ultimo trabajo de Isaki Lacuesta, "Murieron por encima de sus posibilidades", que lo que hizo fue cargarse a todo ese elenco de excelentes actores que estaban totalmente desaprovechados por encima de las posibilidades del director catalán.

Y sería injusto no destacar interpretaciones inolvidables no premiadas, como las de Romain Duris, Tom Hardy, José Sacristán, Barbara Lennie, Nicolaj Coster-Wandau o Antonio de la Torre.

Todo el mundo se quejó de la ingente cantidad de películas que componían la Sección Oficial, y que complicó el trabajo de los obligados a verlas todas. En cuanto a calidad, se podía haber prescindido tranquilamente de cinco de ellas.

En cambio los  medios gráficos quedaron encantados con el cambio de marco en algunas de las sesiones de fotos, ubicadas en la terraza del fotogénico Aquarium de la ciudad.

Las presencias  más destacadas de este certamen corrieron a cargo de Jessica Chastain, Antonio Banderas, Leonardo Sbaraglia, Ricardo Darín, John Malkovich, Denzel Washington, Benicio del Toro (segundo Premio Donostia de este año), Willem Daffoe, Pedro Almodóvar, Omar Sy, Charlotte Gainsbourg, y Romain Duris entre otros.. sin olvidarnos de la veloz y casi imperceptible visita del actor Orlando Bloom, al que muy pocos afortunados pudieron ver.

El "bombazo" del festival, fue sin duda el estreno español en la sección de Perlas del ultimo trabajo de Damián Szifron, "Relatos Salvajes" al que se le augura un gran éxito como el que está disfrutando al otro lado del charco, y que se lleva de San Sebastian "El Premio del Público a la mejor película Europea", un honor que suena al mismo tono de humor negro del film... que podría ser coproducido por España y Francia, pero que es creativamente 100% argentino y por tanto latinoamericano.

Se apagaron las luces del Kursaal y se recogió su alfombra roja hasta el año que viene. Deseamos que la próxima edición no defraude la cosecha, y sin olvidarnos de recordar a quien corresponda aquello de que muchas veces ..."menos es más".

(*): Editora responsable de la cobertura del Festival de San Sebastián en NOTICINE.com

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