Colaboración: Alienígenas somos todos

'Extraterrestre'
Por Josep Maria Jolis

Por fin se ha estrenado "Extraterrestre", la segunda película de Nacho Vigalondo, precedida de un notable éxito de crítica y público en el festival de Sitges. Que quede claro que yo no soy fan del cine de Nacho Vigalondo: su ópera prima ("Los cronocrímenes") no me gustó, aunque el cortometraje "7:35 de la mañana" (nominado al Oscar) me pareció original, conciso y divertido. Tirando de refranero popular solo puedo decir que “al César lo que es del César”: "Extraterrestre" está más cerca, para lo bueno y para lo malo, de "7:35 de la mañana" que de "Los cronocrímenes".

¿Qué es lo bueno? La comedia española necesita un cambio. Una comedia de ciencia ficción (lo segundo es una excusa argumental) es un soplo de aire fresco (que no llega a resfriar) en un panorama dominado por películas que van de graciosas (imitando modelos preexistentes) pero no siempre llegan a serlo. En este sentido "Extraterrestre" es original y hace de la necesidad virtud. Vigalondo tenía pocos medios y agudizó el ingenio creando una comedia con 5 personajes y un único escenario, un piso, a excepción de alguna escena exterior.

El guión es clave. Es una historia enloquecida y descabellada, en la que cada detalle (absurdo) genera más absurdez. Una absurdez muy bien interpretada por todos los actores. Lo admirable es que el guión se sigue con sencillez pero al mismo tiempo tiene una lógica interna extremadamente compleja.

Y ahora lo malo. Hay que ser justos. Es original y divertida. Pero también da la sensación de ser un cortometraje alargado. Pero no importa, has visto algo diferente y has disfrutado con unos extraterrestres que no son los que están invadiendo la tierra, son los ciudadanos que viven en ella.

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