Crítica: "Necrofobia", sangriento cocktail para adictos al género

'Necrofobia'


Por Edurne Sarriegui

Daniel de la Vega, referente del cine de género argentino, estrena su último trabajo esta semana. "Necrofobia" es la primera película de terror filmada en 3D en el país. En este caso el director trabaja en el guion con Nicanor Loretti y Germán Val, con amplia experiencia también en este tipo de cine. A diferencia de su película "Hermanos de sangre", estrenada en 2013, aquí no hay comedia negra sino un trhiller psicológico que toma la enfermedad mental de su protagonista y la muerte de su hermano gemelo como desencadenantes de una serie de hechos horrorosos.

Dante Samot (Luis Machín) es un sastre que sufre necrofobia y suponemos que alguna otra enfermedad mental. Tras la muerte de su hermano gemelo (Tomás) tiene una crisis mientras a su alrededor comienzan a ocurrir una serie de crímenes  y tiene lugar una investigación policial sobre esos sucesos.

De la Vega utiliza el 3 D, el manejo del tiempo y la fotografía  para retratar un mundo entre lo onírico y lo sobrenatural. El sastre vive en un viejo edificio donde tiene la sastrería llena de maniquíes rotos y otros envueltos en plásticos que recuerdan mortajas, los objetos de otro tiempo se amontonan y la muerte rodea al protagonista de maneras sutiles en un entorno asfixiante y desvencijado.

Los guionistas se permiten jugar con los nombres. La ex-esposa de Dante, Beatriz (Julieta Cardinalli), y, su psiquiatra, el doctor Virgilio  (Raul Taibo), le acompañan en su infierno particular. El apellido de los gemelos Dante y Tomás es Samot, el nombre de hermano fallecido al revés, sugiriendo confusión entre las identidades de ambos.

La actuación de Machín cargada de expresiones sobreactuadas y las escenas gore que inundan de sangre la segunda mitad del film se ocupan de hacer hincapié en lo horroroso.

"Necrofobia" es una película que plantea un misterio pero se decanta por mostrar el miedo y el horror respondiendo a los cánones del género.  Seguramente gustará a los amantes de este tipo de películas y hasta podría llegar a convertirse en un film de culto, pero también es muy probable que deje indiferentes al resto de los espectadores.

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