John Leguízamo se compromete a llevar nuevas producciones a Colombia
El actor bogotano afincado en Estados Unidos John Leguízamo apuesta fuerte por su país natal, Colombia, que dejó de niño, y tras filmar este mismo verano a las órdenes de su compatriota Harold Trompetero el drama "Perros", asegura que de la mano de las nuevas medidas gubernamentales para fomentar los rodajes internacionales, "estoy hablando con muchos directores y productores para que filmen en Colombia y no donde tenían planeado".
No es este film sobre un presidiario y su relación con una perra el primero que Leguízamo filma en Colombia. Antes participó en la cinta internacional "El amor en los tiempos del cólera", y en las nacionales "Paraíso travel" y "El paseo 2", esta última una comedia comercial de Trompetero, en la cual se fraguó su amistad.
"Veo mucha evolución en los equipos técnicos. Hay mucho talento y experiencia. El nivel es igual al de Estados Unidos. Hay experiencia en todos los departamentos; operadores de cámaras, vestuario, efectos especiales, etc... La fortaleza del cine colombiano es la creatividad, que no se puede comparar porque es única. El artista colombiano, bien sea escritor, director o actor, siempre está inventando y creando mundos. Su imaginación nunca se agota. Hace falta que el gobierno invierta en crear una industria de cine. La ley ha ayudado mucho, pero para tener una industria que hace de 50 a 100 películas al año se necesita que el gobierno invierta dinero para que Colombia se vuelva el centro del cine latino", dice el actor en declaraciones al boletín de la Comisión Fílmica Colombiana.
En "Perros", John Leguízamo es Misael, un campesino que cae preso por haber cometido un crimen pasional. Durante su condena es olvidado por sus seres queridos, abusado y humillado por los guardias de la cárcel e intimidado y estafado por los reos. En medio de su desolación, encuentra consuelo en Sarna, la perra de la penitenciaría, con la que crea una entrañable amistad, que corre el riesgo de terminarse cuando llega la hora de alcanzar la libertad.
"Disfruté mucho -explica el actor- al trabajar con Harold Trompetero en "El paseo 2". Gracias a su paciencia y a su apoyo logré el sueño de poder actuar en español. Cuando me ofreció "Perros" y lo leí, me pareció que era un regalo porque el guión era perfecto, una poesía contundente. Leo muchos guiones y, generalmente, hay mucha basura pero este es uno de los mejores que leído en años".
"Trompetero es un genio, como lo son Baz Lurhmann, Spike Lee o Brian De Palma. Tiene fe en las infinitas posibilidades que tiene el arte y eso es lo que necesito para actuar, porque la fe lo es todo para un artista", agrega.
Reconoce Leguízamo que su principal desafío en este film ha sido de nuevo la dicción en español, idioma que dejó de hablar habitualmente muchos años atrás: "Me ha costado mucho perfeccionar el español, y ese es, justamente, uno de mis retos y metas. También lo fue interpretar a un personaje medio inocente".
El protagonista de películas como "Moulin Rouge", "Carlito's Way", "Daño colateral / Collateral Damage" o "Romeo y Julieta", y muy popular por prestar su voz al personaje de Sid en la saga "Era de hielo / Ice Age" cita como ejemplo de su implicación en el desarrollo de la industria cinematográfica en Colombia que convenció a la cineasta mexicana radicada como él en EEUU Patricia Riggen, para que filmara acá "Los 33", que ahora se estrena en Chile. "Ella quería irse para Chile y le conté que yo había rodado cuatro películas en Colombia y que me lo había gozado mucho. Le dije que el ambiente creativo era lo máximo y que los paisajes tenían todo: desierto, montañas, selva, ciudades modernas, etc...".
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No es este film sobre un presidiario y su relación con una perra el primero que Leguízamo filma en Colombia. Antes participó en la cinta internacional "El amor en los tiempos del cólera", y en las nacionales "Paraíso travel" y "El paseo 2", esta última una comedia comercial de Trompetero, en la cual se fraguó su amistad.
"Veo mucha evolución en los equipos técnicos. Hay mucho talento y experiencia. El nivel es igual al de Estados Unidos. Hay experiencia en todos los departamentos; operadores de cámaras, vestuario, efectos especiales, etc... La fortaleza del cine colombiano es la creatividad, que no se puede comparar porque es única. El artista colombiano, bien sea escritor, director o actor, siempre está inventando y creando mundos. Su imaginación nunca se agota. Hace falta que el gobierno invierta en crear una industria de cine. La ley ha ayudado mucho, pero para tener una industria que hace de 50 a 100 películas al año se necesita que el gobierno invierta dinero para que Colombia se vuelva el centro del cine latino", dice el actor en declaraciones al boletín de la Comisión Fílmica Colombiana.
En "Perros", John Leguízamo es Misael, un campesino que cae preso por haber cometido un crimen pasional. Durante su condena es olvidado por sus seres queridos, abusado y humillado por los guardias de la cárcel e intimidado y estafado por los reos. En medio de su desolación, encuentra consuelo en Sarna, la perra de la penitenciaría, con la que crea una entrañable amistad, que corre el riesgo de terminarse cuando llega la hora de alcanzar la libertad.
"Disfruté mucho -explica el actor- al trabajar con Harold Trompetero en "El paseo 2". Gracias a su paciencia y a su apoyo logré el sueño de poder actuar en español. Cuando me ofreció "Perros" y lo leí, me pareció que era un regalo porque el guión era perfecto, una poesía contundente. Leo muchos guiones y, generalmente, hay mucha basura pero este es uno de los mejores que leído en años".
"Trompetero es un genio, como lo son Baz Lurhmann, Spike Lee o Brian De Palma. Tiene fe en las infinitas posibilidades que tiene el arte y eso es lo que necesito para actuar, porque la fe lo es todo para un artista", agrega.
Reconoce Leguízamo que su principal desafío en este film ha sido de nuevo la dicción en español, idioma que dejó de hablar habitualmente muchos años atrás: "Me ha costado mucho perfeccionar el español, y ese es, justamente, uno de mis retos y metas. También lo fue interpretar a un personaje medio inocente".
El protagonista de películas como "Moulin Rouge", "Carlito's Way", "Daño colateral / Collateral Damage" o "Romeo y Julieta", y muy popular por prestar su voz al personaje de Sid en la saga "Era de hielo / Ice Age" cita como ejemplo de su implicación en el desarrollo de la industria cinematográfica en Colombia que convenció a la cineasta mexicana radicada como él en EEUU Patricia Riggen, para que filmara acá "Los 33", que ahora se estrena en Chile. "Ella quería irse para Chile y le conté que yo había rodado cuatro películas en Colombia y que me lo había gozado mucho. Le dije que el ambiente creativo era lo máximo y que los paisajes tenían todo: desierto, montañas, selva, ciudades modernas, etc...".
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