Tres profesionales españoles han coincidido en las últimas horas al compartir, en diferentes entrevistas y medios, sus ideas sobre la industria, la propia y la ajena. El director y guionista Fernando Trueba -que este lunes noche recogerá un premio de los productores de EGEDA- confiesa que se tuvo que meter en ese campo porque pese a triunfar con su opera prima ningún productor le llamaba. Por su parte Rodrigo Cortés, realizador de "Buried" y ahora de "Luces rojas" piensa que los grandes estudios de Hollywood no tienen ya interés en las películas de presupuestos medios, y el productor Andrés Santana, cómplice durante años de Imanol Uribe, cree que precisamente con Trueba y otros cineastas de su generación cambió el concepto del productor tradicional en España.

En declaraciones a Radio Nacional este mismo lunes, Fernando Trueba confesaba que aunque la aceptará de buen grado considera hasta cierto punto injusto que le den la Medalla de Oro de EGEDA (la entidad de gestión de derechos audiovisuales de los productores españoles), que premia a un productor por toda una trayectoria en el cine español: "No me he considerado nunca productor. Lo soy porque cuando hice mi primera peli, "Opera prima", fue un exito en el año 80, y suponía que como consecuencia de ello me iban a llamar para hacer otra, pero nunca me llamó ningún productor. Lo que pensé es que si quería seguir en el cine tendría que hacerme productor yo mismo. Es que este (España) es un país muy raro. Se juzga a un juez como Baltasar Garzón, por ejemplo...".

Y abundaba el autor de "Belle epoque" y "Chico & Rita": "Me hice productor por obligación. Yo soy guionista y director. Los premios son injustos porque siempre se lo merecen otro, pero en este caso más que nunca. Se lo tendrían que dar a Cristina Huete (la responsable de producción en su compañía), que es la que se ha encargado de las cosas relacionadas con la producción de mis películas. Yo sólo las he dirigido y escrito".

Por su parte, desde el Festival de Sundance, donde ha presentado su "thriller" parapsicológico "Luces rojas", que protagonizan Robert de Niro y Sigourney Weaver (aunque la producción es mayoritariamente española), Rodrigo Cortés ha dicho a ABC que "Lo que está cambiando es la industria, imagino: los estudios están matando a las películas medianas con inquietudes más adultas, y les es menos arriesgado comprar lo que otros hacen que financiar una película desde cero con un sistema de producción que asumen como ineficiente. Pero todo cambia y todo es pendular. A unos les parece bien y otros se quejan, según les vaya la feria, pero parece más sensato concentrarse en las fichas que discutir el tablero".

Pese a contar con protagonistas estadounidenses como Ryan Reynolds en el caso de "Buried / Enterrado" o de los que ahora protagonizan "Luces rojas", Cortés defiende la españolidad de ambos films: "No estamos en ninguna órbita de Hollywood, tanto "Buried" como "Luces rojas" son proyectos levantados desde España y rodados en España con absoluto control creativo. Nuestra órbita es la de quien quiera que desee acercarse al cine donde quiera que lo haga".

Finalmente, el veterano productor canario Andrés Santana, que competirá en los próximos Goyas de la mano de la cinta de Mateo Gil "Blackthorn, sin destino" ( y sus películas llevan como 60 nominaciones desde que existen esos galardones), cree que su generación cambio el concepto tradicional: "Si no me gustara el cine, no haría ya más películas. Tengo que reconocer que yo vengo de una generación de profesionales que amaban este arte. Fui parte de las primeras películas de unos directores como Fernando Trueba, Fernando Colomo, Eloy de la Iglesia o Ricardo Franco, que además de ser cineastas se convirtieron también en productores y cambiaron la forma de hacer este arte. Con ellos desapareció aquella figura del productor que no se movía de su despacho y que tenía como único objetivo ganar dinero".

En charla con Canarias 7, el productor de "Días contados" o "El rey pasmado" se muestra expectante ante el anunciado recorte de las ayudas públicas al cine: "Hay que tener en cuenta que si las ayudas bajan, descenderá la calidad. Sobre todo porque los bancos no sueltan un duro. No dan crédito y no hay forma de conseguir financiación. Como mal menor, esperamos que las cosas no cambien mucho al respecto".

Santana avanza que su próximo proyecto le unirá con la cineasta catalana Isabel Coixet, y en unas condiciones bastante extremas, nada menos que en el Polo Norte: "Se trata de una historia muy dura, pero estupenda. Es un guión de Miguel Barros, el mismo que escribió "Blackthorn". Pero si la llevamos a cabo será un rodaje complicado, que habrá que planificar muy bien y que no creo que se lleve a cabo durante este año".

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