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Margarethe von Trotta reivindica en Segovia un cine con la mirada "diferente" de las mujeres

Von Trotta con su premio segoviano (El Adelantado)
Como "Un premio muy especial", definió la cineasta alemana Margarethe von Trotta el As, galardón de honor por su carrera, que recibió en el marco de la Muestra de Cine Europeo de Segovia, al coincidir con el año y el mes del vigésimo quinto aniversario de la caída del muro de Berlín. El viernes noche tuvo lugar la ceremonia que homenajeaba a la directora y guionista autora de cintas tan recordadas como "El honor perdida de Katharina Blum", "Las hermanas alemanas", "Rosa Luxemburg" o "Rosenstrasse".

En el escenario del Parador de Segovia, donde tuvo lugar la gala, su rostro se multiplicaba a modo de fotografías formando un mosaico que le hizo estar presente incluso cuando no se hablaba de ella. Una de las más importantes creadoras de la cinematografía alemana con más de treinta años de experiencia en este arte. La gala, donde se respiraba cultura por todos lados, fue conducida por el actor gallego Javier Veiga, que aportó el toque de humor idóneo y que, incluso, soltó alguna pequeña pulla, camuflada entre chiste y chiste, al país invitado, Alemania.

Hubo tiempo también para recordar a otras personalidades europeas del cine. Uno de ellos fue el mítico director de fotografía Teo Escamilla, considerado como uno de los mejores en su profesión, con trabajos como "Cría cuervos" o "El desencanto" a sus espaldas. El encargado de hablar sobre él fue su hijo Jacobo que, entre emotivas palabras, destacó como su padre "pasaba más tiempo detrás de la cámara y en la sala de montaje, que con su familia". El director Antonio Giménez Rico, también quiso dejar unas palabras de recuerdo para aquel "perfeccionista" al que ningún plano se le resistía.

La diseñadora Bina Daigeler, que presenta una colección de diseños de sus diferentes filmes llamada Vestir de Cine en estos días, subió al escenario, de manera sorpresiva, para dar las gracias sobre el trato que ha recibo en la ciudad y para dar su apoyo al cine español, por el que siente mucha afinidad.

La última recta de la ceremonia tuvo nombre propio, Margarethe von Trotta. Solamente hubieron buenas palabras para la realizadora alemana, primero por parte del crítico Carlos Reviriego, que puso al día a aquellos asistentes que no estaban familiarizados con su filmografía, así como de los emotivos personajes femeninos de su obra. Personajes complejos, que han sido influenciados por el peso de la historia.

La importancia del psicoanálisis en sus trabajos fue confirmada por el atropellado discurso (debido a los diversos traspiés en la traducción) de su psicoanalista. Esta,  remarcó la importancia de los personajes de la directora germana y los definió como "mujeres que piensan por sí mismas". Por otro lado la directora de Goethe Institute de Madrid, Margareta Hauschild, volvió a subrayar lo significativo que fue la aparición del Nuevo cine alemán, que juntó en su haber autores como Wenders o Fassbinder y al que Margarethe se unió posteriormente.

La noche culminó con la ovación del auditorio y la entrega del As a Von Trotta, quien en Segovia ha reivindicado un cine femenino, "porque las mujeres ven las cosas de manera diferente, tienen otras prioridades, otros problemas, aportan algo distinto".

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