Imprimir

Fernando Eimbcke se enfrenta al veredicto del público mexicano con "Club Sandwich"

Fernando Eimbcke
Más de un año después de su estreno en Toronto, "Club Sandwich", la más reciente realización de Fernando Eimbcke, director de "Temporada de patos" o "Lake Tahoe", llega esta semana a las salas mexicanas. Por tercera vez, pero ahora sin su habitual colaboradora en el guión, Paula Markovitch, el cineasta chilango incide en una época clave de cualquier vida, la adolescencia, momento de descubrimientos y construcciones. En declaraciones a NOTICINE.com, Eimbcke asegura que "para mí, las películas que hago son como mis hijos, las defiendo todas".

"Club Sandwich" es la historia de Paloma y su hijo de quince años, Víctor, quienes mantienen una relación muy intensa y especial. Cuando pasan unas vacaciones en la costa, Héctor conoce a Jazmín, una adolescente con la que descubre los primeros destellos del amor y el sexo. Tratando de mantener a Héctor cerca de ella, Paloma pasa un mal trago cuando tiene que aceptar que su hijo está creciendo y que dejará de ser el mismo hijo y mejor amigo que ha tenido durante todos estos años.

Lleva el realizador mexicano un año recorriendo el mundo con su película bajo el brazo. Pocas cosas más universales que la confusión de la adolescencia, común a todas las culturas, y "Club Sandwich" ha saltado con soltura de Norteamérica a Asia, pasando por Europa, y logrando premios y distribución en otras naciones, incluso antes que en su país de origen. "La película se presentó en Toronto, de ahí fuimos a San Sebastián, donde obtuvo el premio de mejor director, de ahí fuimos a Morelia, en México, y después a Torino donde ganó el premio a mejor película", detalla Eimbcke.

Espera que la acogida del público mexicano, parte del cual ya la vio en Morelia, a su cinta supere a la del anterior, "Lake Tahoe", que fue inferior al de su opera prima, "Temporada de patos": "Esta película le gusta más a la gente que "Lake Tahoe", sobre todo a partir del segundo acto que la película sube cuando aparece la chica. A la gente le gusta mucho la relación de lucha que tiene con la mamá".

Confiesa el guionista y realizador que en estos periodos viajeros no es capaz de trabajar en nuevos proyectos... sobre todo propios. "Me cuesta mucho trabajo estar con una película y pensar en otra, así que me lo tomé con calma, toca disfrutar de la película, y mientras, estamos produciendo unas cuatro o cinco películas con nuestra productora Cine Pantera. Se aprende mucho viendo el cine desde otro frente. El espíritu de la productora está en dar libertad total a los directores, ese es nuestro sello".

A pesar de que en esta ocasión no haya contado como en sus anteriores films con la colaboración en el guión de la argentino-mexicana Paula Markovitch, Eimbcke no cree que se haya desligado de su influjo. "Paula Markovitch es mi maestra, siempre me ayudó y siempre estará allí. En este proyecto fue un gran reto trabajar con un personaje adulto porque es lo que más me cuesta y sus consejos me ayudaron mucho. Aunque en este caso no trabajásemos juntos, ella siempre está presente", afirma.

Ahora, tras por fin estrenar en salas comerciales mexicanas, Eimbcke espera poder centrarse en un futuro film: "Seguramente empezaré un primer tratamiento, pensaré que es una basura (risas), lo guardaré en un cajón y al cabo del tiempo lo sacaré, lo veré desde otro punto de vista y volveré a enamorarme de nuevo. Este proceso puede dura entre tres o cuatro años, soy de producción lenta, me gusta nutrirme mucho antes de empezar".

Piensa el cineasta que el cine mexicano vive en un buen momento en varios frentes, empezando por el comercial y siguiendo por el apoyo oficial: "Se están cubriendo todos los aspectos, tanto en los festivales, donde siempre hay una película mexicana, como en taquilla. Eso habla de una producción diversa y además está la otra parte, la de los directores mexicanos que van a Estados Unidos a hacer cine". En su opinión, sucesos como "No se aceptan devoluciones", "Nosotros los Nobles" o "Cantinflas" ayudan a crear industria,"a producir muchas películas, 80 o 100 al año. Te da la posibilidad de hacer todo tipo de películas y el Estado también se ha dado cuenta de que puede beneficiarse de esto".

Sigue nuestras últimas noticias por TWITTER.