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Murió el carismático Drácula hispano-mexicano, Germán Robles

Germán Robles
Este fin de semana falleció a los 86 años el legendario actor español afincado en México Germán Robles, marcado toda su vida por el personaje de Drácula en el film de horror "El Vampiro" (1957), y que en el teatro tuvo por 18 años el papel estelar de "La dama de negro". Nació en España, el 20 de marzo de 1929. En su patria realizó sus primeros estudios y muy joven se trasladó a México, donde estaba exiliado su padre por la Guerra Civil. En su nueva patria inició en 1948 su carrera actoral, en cine, teatro y televisión.

Aunque su actuación más celebrada en el cine es la de "El vampiro" (1957), uno de los escasos clásicos mexicanos del género del horror, su amplia trayectoria en los sets cinematográficos incluye más de medio centenar de cintas, entre ellas "La vida de Agustín Lara" (1958), "Pueblo en armas" (1958), las cuatro cintas de la serie sobre "Nostradamus" filmadas en 1959, "El barón del terror" (1961), "Dos caballeros de espada" (1963), "El Zurdo" (1964)," Cuernavaca en primavera" (Tres comedias de amor, 1965), El proceso de Cristo (1965), "El jardín de tía Isabel" (1971) y "El jinete de la divina providencia" (1988), enbtre varias más.

"El Último Evangelio" fue la penúltima película de Germán Robles, aún inédita y que está a punto de ser lanzada.

En televisión participó en las telenovelas "Pasión", "Amigos x siempre", "Serafín", "Los hijos de nadie", "La antorcha encendida", "Marisol", "Los años felices", "El concierto de almas", "El derecho de nacer", "La impostora", "Deborah", "Viviana", "Rocambole" y "Divorciadas", entre otras. Descanse en paz

En declaraciones a El Alebrije, Robles explicaba así sus inicios: "Cuando llegué aquí, continué con mi carrera que estaba estudiando, era Ingeniero Industrial, además comencé a trabajar en una constructura de hispanoamericanos, luego en una casa de decoración y así transcurre todo hasta que mi padre le hace unos juegos florales a mi abuelo, Pachín de Melas, quien es creador del Teatro Asturiano, yo decía unas poesías. Y entre el centenar que estaba, Rambal se encontraba entre el público, resulta que Rambal padre se iba a pelear con Rambal hijo, quien estuvo aquí mucho tiempo como actor. El quería poner en teatro "El Martir del Calvario", pero se habían quedado sin Cristo, entonces estaban buscando un actor que pudiera interpretar a Jesucristo. El acude a donde yo estaba y dice -¡este es el Cristo que necesito yo!- debuté el 1 de febrero de 1952 en el Teatro Ocampo de Morelia, como Cristo en "El Martir del Calvario" y amigo mío, hasta la fecha".

Sobre su papel más popular, el de Drácula, comentaba: "En la película "El Vampiro", recibí dos consejos básicos; uno por parte de Mercedes Soler y el otro por parte de Fernando Mendez… El de Meche Soler, el primer día de llamado se acerca a mi y me dice -Mira Germán, es tu primer película ¿verdad?, no te olvides que el cine son ojos, todo lo que tu pienses honradamente surgirá atraves de los ojos y facilitará lógicamente la interpretación del personaje que tratarás de llevar adelante, no olvides ser siempre sincero con lo que vas a decir a través de los ojos- y el segundo consejo me llega al tercer día, yo todavía no entraba a cámara, se acerca Fernando Mendez y me pregunta si ya había leido el libreto, yo le respondí que si; luego me dice -Mira, es una película de terror, no tiene nada que ver con el Dracula, y te quiero pedir un favor personal como director, yo no quiero que hagas un monstruo, quiero que hagas un vampiro cachondo, quiero que tenga una sexualidad y una sensualidad extrema, para que haya el acercamiento por parte del género femenino, simplemente la mirada, el tono de voz, la tomada de la mano, la elegancia- y lo que el me pide es mi mejor registro de voz y mi mejor mirada, haciendo caso de lo que me había dicho Mercedes Soler. Entonces esto formó una especie de amalgama muy gozosa que me sirvió para sacar adelante las dos películas y tener el éxito que tuvieron, no obstante el tiempo, no obstante la carencia de efectos y tienen un encanto que yo la veo y esté hecha con un gran cariño, con un gran amor y llega oportunamente después de la postguerra a cubrir un espacio que no existía en el mundo que era las películas de terror. Y motivo por el cual mi actuación le sirvió a Christopher Lee para hacer su Dracula y lo dijo él, se lo dijo a un amigo, Rolando de Castro, que estaba en España en la BBC de Londres. Rolando me comentó -Me dijo Christopher Lee que gracias a tu vampiro él pudo realizar su Dracula en plan de galán-".

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