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Con la entrega de la Espiga de Honor a la actriz Angela Molina, quien canceló su encuentro con la prensa por un dolor de cabeza, y la proyección de la cinta de José Luis Cuerda y Manuel Rivas "Todo es silencio", arrancó este viernes la 57 edición de la Semana Internacional de Cine de Valladolid. Fuera del Teatro Calderón, varios cientos de personas quisieron provocarle también con sus protestas otro dolor de cabeza al ministro de Educación, Cultura y Deportes, José Ignacio Wert, también aludido antes por Cuerda y su actor Juan Diego.

El veterano cineasta calificó al polémico ministro, horas antes de la llegada de este a Valladolid, de "punta de flecha" de su colega y responsable económico Cristobal Montoro por los recortes que afectarán al cine, y dijo que pronto películas como la suya serán inviables en España por falta de ayudas públicas. "No se puede hacer lo que están haciendo con la Cultura y con nuestro cine. Películas como ésta, con un rodaje de ocho o nueve semanas parece que pasarán a la historia y que no serán posibles en el futuro", afirmó.

Cuerda criticó el diferente rasero aplicado por el Ministerio de Hacienda al cine respecto del fútbol, en lo que al peso impositivo del Impuesto del Valor Añadido, que está reduciendo la afluencia a las salas. "¿Cómo pueden conceptuar el cine como 'entretenimiento' -expresó el realizador de "La lengua de las mariposas"Amanece que no es poco" y "El bosque animado"- para defender la subida del IVA? Dicen que es entretenimiento y luego que el cine es un coñazo. No hay quien se aclare. ¿Por qué no aplican el IVA al fútbol, que eso sí que es entretenimiento? Aunque deban un dineral a Hacienda y a la Seguridad Social nadie dice del fútbol que nos está robando el dinero a todos los españoles, como sí se dice del cine".

También el actor Juan Diego, quien en "Todo es silencio" interpreta a un cacique de la Galicia profunda convertido en "capo" del narcotráfico, habló de política además de cine: "No nos merecemos esto como pueblo y como gente de la cultura, no nos merecemos este castigo. No se puede hacer lo que están haciendo con nuestro cine y con la cultura". Pocas horas después el actor, y otros de sus colegas, como Paco León, se acercaron a la entrada de la gala inaugural a las personas que se manifestaban ante el teatro contra el ministro Wert y la política del gobierno en lo relacionado con la Educación y la Cultura.

Durante el acto, en el que la actriz Elena Anaya fue la encargada de "amadrinar" la naciente edición del festival y leer la carta de su director, Javier Angulo, Angela Molina recibió la Espiga de Honor, horas después de haber llegado a la ciudad castellana y cancelar su encuentro con la prensa "por un dolor de cabeza", según fuentes de la organización dijeron a NOTICINE.com. La veterana actriz, que ha trabajado con directores españoles de la talla de Luis Buñuel, Pedro Almodóvar, José Luis Borau o Manuel Gutiérrez Aragón, y acaba de participar en "Blancanieves", de Pablo Berger, dijo que ese tipo de molestias de salud le duran "tres días", de manera que se canceló completamente su rueda de prensa.

Tras la concesión de uno de los dos galardones a la carrera de esta edición de la Seminci (el otro será para el compositor candidato al Oscar Alberto Iglesias), se proyectó el film inaugural del festival, "Todo es silencio", una nueva colaboración entre José Luis Cuerda y el escritor gallego Manuel Rivas, autor de uno de sus principales éxitos, "La lengua de las mariposas". Su nueva experiencia conjunta es un drama triangular con el trasfondo del narcotráfico gallego en los años 80, protagonizado por Quim Gutiérrez, Celia Freijeiro, Miguel Ángel Silvestre, Juan Diego y Chete Lera, que fue recibido con división de opiniones.