Alejandro Molina debuta en Morelia con "De día y de noche"

por © IMCINE-NOTICINE.com
'De día y de noche'
'De día y de noche'
Tras 15 años de trabajo en la industria cinematográfica mexicana, sobre todo en el campo de la producción, Alejandro Molina se ha lanzado a la dirección con "De día y de noche", su ópera prima, que acaba de presentar en el marco del Festival de Morelia. Fundador de la escuela de cine Arte 7, el nuevo guionista y realizador dispuso para esta historia futurista de los actores Sandra Echeverría, Manuel Balbi y la niña Gala Montes de Oca, junto a Fernando Becerril y Juan Carlos Colombo. Molina habló sobre su film con Rosa Elena Velasco.

- ¿Cómo nace el proyecto de "De día y de noche"?
La idea surgió desde hace 9 o 10 años y tocaba el tema del segundo piso, de la sobrepoblación, del tránsito. Pero la premisa de la película empieza a tomar forma a partir de una nota del periódico y el planteamiento del jefe de gobierno del D.F. que proponía que los camiones de carga sólo pudieran transitar durante la noche. De ahí viene la tesis de ¿qué pasaría en un mundo donde el trabajo, por la necesitad de productividad de un país, dividiera los turnos de vida para los habitantes: unos trabajan de noche y otros de día? Mi película no especifica ni fecha ni sitio, pero se supone que es México en un posible futuro donde propongo que hay una cúpula autoritaria que ha cambiado el pensamiento, la ética y la moral a tal grado que se han difuminado todas las emociones y sentimientos humanos, y el principio autómata se basa en la productividad de los bienes para toda la sociedad. De aquí surge el drama donde se encuentran dos personas que viven en distintos turnos de vida, pero por azares del destino se ven involucrados con una niña que cambia de manos. Manejo el thriller y el suspenso para lograr que los protagonistas se encuentren con un grupo rebelde que quiere cambiar la enzima que controla el despertar de la gente. Ahí aparece la historia de amor. Porque sí, es una historia de amor que presenta una visión del futuro sobre una sociedad muy contenida.

- ¿Considera que es una película comercial?
Es muy difícil opinar sobre qué es una película comercial o no. Esta película tiene un argumento comercial, por lo que yo creo que le debe gustar a la gente. Habla de la imposibilidad de estar juntos y de comunicarse, de la dualidad del día y la noche, del bien y el mal. Pero se presentan varias caras de la moneda. Por lo que también pretende hacer pensar a la gente y no sé si eso signifiqué que no sea comercial.

- ¿Qué obstáculos enfrentó la producción de la cinta?
Es una película que enfrentó todos los obstáculos. Primero porque es ciencia ficción chiquita. En producción tuvimos muchos problemas, por ejemplo, un llamado en Acapulco, Guerrero en una playa donde los ejidatarios nos sacaron con machetes. Tuvimos que salir de Acapulco y nos echamos 4 o 5 semanas de stand by, tiempo muerto, para buscar otro lugar para filmar, luego nos apoyó el estado de Colima y terminamos en Manzanillo donde concluimos la película. También tuvimos obstáculos en el proceso de edición, donde hubo varios cortes. La película tiene muchas tramas, mucho género dentro y fue muy complicado encontrar la línea narrativa. Fue mucho trabajo de edición.

- ¿Cómo llegó al cine?
Estudié comunicación y luego hice varios cursos de cine. Hace muchos años conocí a Jaime Romandía y fui socio de Mantarraya Producciones, durante el proceso de Japón. Después tomé mi rumbo y abrí la escuela de cine Arte 7 donde conocí a muchos buenos amigos, entre ellos el coguionista de De día y de noche, con quien he producido películas para Everardo González, Juan Pablo Villaseñor y Juan Patricio Riverol. La verdad es que quise dirigir desde chico y los azares del destino me llevaron a conocer a Jaime. Soy cinéfilo y siempre soñé con hacer cine.

- ¿Después de Morelia, qué sigue?
Estoy terminando otro guión. Se llama Los Presentes y es un drama fantástico. Trata de una muy bonita leyenda mexicana que quiero rescatar en una versión contemporánea. También quiero seguir trabajando en la escuela, retomar la labor de dar clases; me gusta estar con los chavos, enseñarles lo que sé. Y el año que viene, buscar recursos para levantar la siguiente película para el 2012.

- ¿En su opinión, qué tan difícil es hacer cine en México y qué se necesita para lograrlo?

Las películas en que he trabajado han sido tanto subsidiadas por estado como independientes. "Japón" y "Ópera" empezaron siendo independientes pero también he producido películas que han tenido el apoyo desde la producción. Entonces me he dado cuenta de las posibilidades del cine en México, sobre todo en este cine que se puede llamar de arte. Un cine que busca la identidad mexicana y una observación clara del director respecto a la realidad. Creo que he aprendido a utilizar los recursos y hacer buenas alianzas estratégicas con productores, con distribuidores. Finalmente llevo 15 años en esto.

SI QUIERES COMENTAR ESTA INFORMACIÓN, VEN A NUESTRO FACEBOOK...