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El realizador, guionista y productor vasco Alex de la Iglesia está de actualidad por dos cintas recién estrenadas, la coral "Words with Gods", en la que dirige uno de sus episodios, en torno a la fe católica, al lado de cineasta de la talla de Kusturica, Babenco, Mira Nair, Bahman Ghobadi... y Guillermo Arriaga, el mentor de todo el proyecto, y el documental "Messi", sobre la figura del jugador argentino del Barcelona. NOTICINE.com dialogó con él en exclusiva sobre estas cintas aparentemente tan alejadas de su previa trayectoria.

- Cuéntenos como ha sido su participación en "Words with Gods"
La película trata de la relación de los directores o de los cineastas con la religión y con Dios, entonces cada uno representa una religión diferente. Hay musulmanes, ortodoxos y en mi caso, católico. Se me encargó la fe católica. A mí lo que más me acerca o lo que más me interesa de mi religión es el perdón de los pecados. Si tú eres una persona buena, correcta, que no comete errores, estás a bien con Dios y se  supone que vas al cielo y tienes todo tipo de premios. Sin embargo si eres una persona cruel, perversa y decadente, llena de vicio y lujuria, tienes pocas posibilidades. Sin embargo, si en el último momento te arrepientes, Dios te quiere más que a la persona correcta. Porque en la religión católica el ser pecador forma parte del ser humano y eso me resulta muy atractivo. El saber que para Dios, o para quien esté en el cielo examinándonos, yo valgo más si cometo pecados, cometo errores y me arrepiento de ellos e intento corregirlos valgo más que una persona que sencillamente se limita a hacer las cosas bien, a mí eso me parece maravilloso. Me llena de esperanza (Risas).

- Usted empezó con los cortometrajes, sedujo a Almodóvar con uno de ellos, "Mirindas asesinas", y ahora después de muchos años vuelve a hacer uno. ¿Cómo se ha sentido?
Sí, es curioso eso, porque ya te metes en el mundo del largometraje en el que hay muchos factores que entran en la elaboración de una película, hay factores económicos, de producción... Todo eso te genera una presión enorme. Sin embargo, de pronto, haciendo este corto he tenido una gran libertad. He tenido la suerte de ser producido, de que el productor fuera un amigo, que es Guillermo Arriaga, y también Alex García y Lucas Akoskin, que son magníficos, y gracias a ellos y a su apoyo he podido hacer lo que me ha dado la gana. Y eso libera mucho, se trabaja muy bien así. Y, además, he tenido la suerte de que les gustó mi trabajo.

- No deja de tener gracia que sus dos últimos trabajos tengan que ver con dos cosas difíciles de asociar con usted, de entrada: el fútbol y la religión…
Las dos son religiones, sí. El fútbol también es una religión.

- Sobre todo en España y en la mayor parte de América Latina ¿no?
Sí, en España y en todas partes la gente pertenece a un club como quien pertenece a una secta religiosa. Y todo lo demás no le interesa. Solamente le interesa su equipo y sus futbolistas y puede llegar a odiar a otros que forman parte de otras religiones. Ese tipo de fútbol talibán parece que es esencial en el negocio del fútbol. También hablamos un poco de eso en el documental.

- ¿La decisión de trabajar estos dos temas ha sido casual?
A mí lo que me gusta mucho es escapar de mí mismo, intentar hacer cosas diferentes, y cuando se me encargó el trabajo de hacer un documental sobre Messi, pues me parecía interesante precisamente por mi ignorancia. Digamos que yo no soy un experto en fútbol en absoluto, me gusta contar historias y contar una historia aprendiendo mientras la estoy rodando es algo muy atractivo porque la misma elaboración del documental me daba datos para seguir avanzando y a parte tener grandes colaboradores, sin duda, Jorge Valdano es una persona que sí sabe lo que hace y lo que dice. Y no solamente eso, mi montador Domingo González es una persona extraordinaria que ha hecho un trabajo increíble, sin él todo esto no hubiera ocurrir, sin más.

- ¿Qué encontrará el espectador en "Messi"?
Es un documental acerca de un jugador de fútbol muy conocido y también muy misterioso porque es todo lo contrario a lo que uno se espera de un jugador de fútbol. Todo el mundo piensa que son personas muy glamourosas con una vida social increíble, con mucho éxito con las mujeres…  Y Messi es todo lo contrario, es un tipo cerrado en sí mismo, habla muy poco, cuando habla parece increíblemente tímido y resulta extranjero en todas partes, yo creo que el único sitio en donde él se siente realmente a gusto es en su ciudad, en Rosario. Entonces da la sensación de que hay un misterio… ¿Por qué es así?, ¿por qué no se abre a los demás o por qué no permite a los demás tener una idea más cercana de sí mismo?

- ¿Qué ha aprendido usted sobre Messi haciendo la película?
Lo primero que descubres es lo mucho que ha sufrido. Porque no es una persona normal, era muy pequeño cuando empezó a jugar, jugaba muy bien pero era francamente bajito y tuvo que someterse a un tratamiento médico hormonal para poder crecer; la gente le decía que no iba a poder jugar al fútbol, de hecho cuando él viaja a Barcelona se cambia de equipo fundamentalmente porque un equipo argentino no puede pagar su tratamiento médico y cuando su familia está apostando por él tardan casi año y medio en que juegue realmente para el Barcelona con lo que la familia casi se descompone en un momento determinado, es una situación muy dramática en su vida, y después de todo eso tampoco estaban convencidos de que él tuviera la envergadura suficiente para ser un jugador del Barcelona. Al final lo consigue exclusivamente por su capacidad como jugador, nada más que por eso, juega tan bien que convence a todo el mundo de que es posible y eso habla de un gran espíritu de superación. Es una persona que se está continuamente superando, intentando solventar problemas, no es alguien que lo haya tenido fácil en absoluto. Yo creo que es por eso que Messi siempre se intenta proteger y cerrarse en su propia familia. Dicen que cuando tiene vacaciones no va a Cannes o a la Riviera Francesa ni a las islas Fiji. Se vuelve a Rosario, a su pueblo. Y por lo que me cuentan mantiene a los mismos amigos de la infancia. Otra cosa curiosa es que a su novia y actual mujer, la conoce a los ocho años. Me da la impresión de que es un personaje de John Ford, de una sencillez similar a esos personajes honestos y con una especie de visión muy sencilla de la vida. Y eso me resulta atractivo porque es todo lo contrario a lo que tú podrías imaginar de un futbolista.

- ¿Cómo decidieron formalmente aproximarse a la personalidad del jugador argentino del Barcelona?
Quería que esto no lo contara yo sino que lo contaran los personajes implicados en la historia, por eso hicimos una cena. La película es en realidad una cena en la que jugadores, entrenadores, familiares… (Bueno, familiares no, son amigos de él) se reúnen y hablan del personaje. Entonces al final ha quedado un asunto muy cinematográfico. Y por otro lado también ficcionamos de lo que hablan, descubrimos  cuál es el secreto. ¿Y cuál es el secreto? Pues yo creo que el amor a su abuela. Su abuela es la que le dice: "Tú vas a ser un gran jugador". Y su abuela es la que le lleva a jugar al fútbol por primera vez. Su abuela muere muy pronto y él la recuerda como algo esencial en su vida y de hecho, siempre que juega un partido de fútbol, dedica su éxito a su abuela que está en el cielo. Es algo muy sencillo y a la vez muy bonito que yo creo que es especial en un jugador de fútbol.

- ¿Nos podría hablar un poco más de ese set que creó?
Claro, nosotros decíamos ¿por qué no creamos una cena en la que estén todos los personajes implicados en la historia? Y me dicen: "Mira, Alex eso va a ser imposible, no vamos a conseguir un solo día en el que esté todo el mundo cenando en un mismo sitio, a parte de que no vamos a poder rodarlo y necesitaríamos días para rodar eso". Entonces empieza a surgir la idea de construir el mismo decorado en Buenos Aires y en Barcelona. Entonces montamos dos sets que parecen el mismo. Cuando trabajábamos con los entrevistados decíamos: "allí en la derecha se supone que está Cruyff, allí en la izquierda está Menotti, allí está Sabella". Entonces hablaban dirigiéndose a ellos y daba la sensación de que, en el fondo están todos juntos. Pero son igual cuatro meses de rodaje separados en el tiempo y dos localizaciones totalmente distintas, a cada lado del Atlántico.

- ¿Cree que este documental es exclusivo para fans de Messi en Argentina o España o puede ser el atractivo para un público que no sea aficionado al fútbol?
Bueno, conocer  al personaje yo creo que es interesante. Precisamente porque yo tampoco soy un fan del fútbol. A mí no me empuja como me empuja el cine, en ese sentido soy cineasta. Pero me cae bien, me gusta la gente que se ilusiona y que pone su vida en jugadores y en la emoción del fútbol. Porque a mí me pasa lo mismo con el cine. Entonces disfruto mucho intentando enganchar a la gente en una historia que al final termina siendo emotiva. Yo creo que sirve para cualquiera que tenga ganas de conocer al personaje. Desde luego es una película para amantes de Messi, para gente a la que le gusta Messi, yo creo que son los que más van a disfrutar.  Tampoco hemos querido ser escabrosos, no hemos querido hablar de… de hecho, lo nombramos. En la película nombramos sus problemas con Hacienda, nombramos el rechazo que tuvo en Argentina. No hemos evitado hablar de un posible lado oscuro de su historia pero no nos hemos centrado en ello porque lo que queremos es hablar del futbolista, más que nada.

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