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A semana y media de su estreno en las salas norteamericanas, "Los juegos del hambre"("The hunger games") se está convirtiendo en un fenómeno juvenil que recuerda y podría superar al de "La saga Crepúsculo". De hecho, las preventas de los boletos a estas alturas ya mejoran a las de "Amanecer 1". Desde principios de esta semana un lugar que ha sido emblemático para las "twihards", la esplanada ante el Teatro Nokia de Los Angeles, se vio ocupada por quienes hacían cola para no perderse el próximo estreno de la cinta.

Pese a que finalmente llegó a superar los 30 millones de recaudación, "John Carter" no pudo encabezar la taquilla norteamericana del fin de semana y es bastante difícil que logre su rentabilidad a pesar de la mejor respuesta al film en los mercados foráneos, donde debutó por encima de los 70 millones. El motivo es simple: su altísimo coste de producción y marketing, superior a los 300 millones. Otro batacazo (uno más para Eddie Murphy) fue para la comedia "A thousand words", que sólo pudo ser sexta, mientras que a pesar de haber decepcionado al público que acudió a verla, la cinta de terror "Silent house" con un cuarto puesto y 7 millones de dólares ya es negocio por su bajo presupuesto.

Desde un planeta tan lejano como Marte, una caída hacia la cruda realidad terrestre puede ser realmente dura. "John Carter" encabeza el trío de estrenos de este viernes en la cartelera norteamericana con escasas posibilidades de éxito. Incluso los resultados de las sesiones de medianoche del pasado jueves fueron mediocres (sólo medio millón de dólares), por lo que toda las velas de la Disney deberían ahora mismo estar puestas en los mercados foráneos. También se han estrenado la cinta de terror protagonizada por la efervescente Elizabeth Olsen "Silent house", que no es sino el "remake" made-in-USA de la uruguaya "La casa muda", y la comedia (es un decir) de Eddie Murphy "A thousand words", con mejores perspectivas para la primera.

La película de Rodrigo Cortés "Luces rojas", protagonizada por Robert De Niro, Sigourney Weaver, Cillian Murphy y Elizabeth Olsen, se ha convertido en el mejor estreno del cine español en los tres primeros meses de 2012, al llegar a 1 millón 200 000 euros de recaudación en sus tres primeros días. Se rodó en España en su mayor parte (salvo algunas escenas exteriores en Canadá) y su producción es muy mayoritariamente nacional, así como el equipo técnico, pero se filmó en inglés, con actores anglosajones y se ha estrenado doblada. Su historia tampoco tiene nada que ver con el país ibérico... Es un éxito para el cine nacional, pero ¿Tiene que no parecer española una película española para tener éxito?

El libro "Cine México 1970-2011", presentado este lunes en el Festival de Guadalajara, se enfrenta a una serie de preguntas sobre la relación entre las películas nacionales y el público: ¿Por qué no se ven las películas?, ¿por qué no hay espacio suficiente?, ¿por qué no tiene el éxito que tiene en otros lados en su propio país?. Para el coordinador de la obra, José Rodríguez López "Rolo": "Uno entiende que no hay una respuesta única, sino que esto proviene de una cuestión más compleja a la que hay que acercarse a profundidad", y lo ha hecho a través de 22 ensayos de especialistas.